martes, 12 de junio de 2012

Hágase Internacional:


Hace dos años que unos cuantos fanáticos de la microficción aprovecharon la existencia de la red para suprimir el océano que físicamente les separaba, y decidieron inaugurar una revista digital especializada en microrrelato. 

La acogida que podía tener la publicación era para ellos una incógnita, pero puedo asegurar -como si hubiera estado presente- que ni en sus mejores sueños esperaban conseguir el número de lectores, seguidores y amigos que tienen a día de hoy. Y mucho menos, que el mismo día en que cumplieran dos años alumbrarían una colección de miniantologías que inaugurarían con una colección de microrrelatos de la mismísima Ana María Shua

Aquí les dejo, para su lectura y su descarga, El Deseo Secreto. Celebren junto a la Internacional Microcuentista sus dos primeros años de existencia y no olviden que estos fanáticos de la microficción -lo sé de buena tinta- les están eternamente agradecidos.

7 comentarios:

Pedro Sánchez Negreira dijo...

Por favor, Don Fernando, transmítale mis deseos de felicidad y buenaventura a esos locos.

Un abrazo,

Pablo Gonz dijo...

Yo estoy muy agradecido a la Inter por el trabajo de catalización que hacen en el mundo del microrrelato. Sois -ya lo he dicho en otra ocasión– algo así como una plaza por la que se debe pasar para ir de un sitio a otro.
Con cariño, Felicidades.
P

Nicolás Jarque dijo...

Fernando, vuelvo a felicitar a la Internacional Microcuentista por su aniversario y su buen hacer con el mundo del microrrelato.

A seguir así de bien.

Un abrazo.

Elisa dijo...

Enhorabuena, Fernando, por vuestra labor y, sobre todo, por lo que disfrutáis con ella. Un abrazo.

Víctor dijo...

Eso Fernando, felicita a esos chicos de mi parte. Pero cuidado con la cartera; son peligrosos. Abrazos internacionales.

Rosa dijo...

Felicidades por estos dos años cargados de buenas letras y a seguir así muchos años más.

Besos desde el aire

Fernando Sánchez Ortiz. dijo...

Muchas gracias a todos por vuestras felicitaciones. Seguiremos adelante.